¡Cataluña! Campos sembrados.
Albas encendidas por un mar garzo.
Miles de ojos en ti encerrados,
que no saben llegar a tu dulce regazo.
Montes, valles y ríos bravíos,
senderos de mil guerreros luchadores,
camino obligatorio de gentíos,
que buscaban la adhesión a tus labores.
Playas de un mar sin fronteras,
que desde Algeciras a Estambul
vive en ti una eterna primavera
que te dan tu color verde y el azul.
Por qué, ¡Oh! Dios. Quieren encerrarte,
poner fronteras a tus sienes y cimeras;
si eres la Cataluña que auxilio reparte
a todo aquel que de tu apoyo requiera.
No te vayas Cataluña de mis entrañas
Quédate conmigo, aquí a mi vera.
Eres en el mundo el orgullo de España,
no permitas que mi alma sin ti, muera.
¡No por favor! No quiero ser extranjero.
Clama a los soberbios. Di a los altivos,
que sentirme en tu territorio forastero
es llorar, es gemir, es morir sin motivo.